domingo, 27 de octubre de 2019

"Los secretos" del triunfo de Maya

Carlos Maya elegido alcalde de Pereira para el periodo 2020 - 2023
Varias fueron las razones para que el legado del Cambio continúe como lo vendió en su campaña a la Alcaldía de Pereira. Veamos:

Un elemento fundamental tiene que ver con la gestión del alcalde Juan Pablo Gallo, de buen reconocimiento en la ciudad, y que fue capitalizada por Carlos Maya, como su sucesor, a pesar de que en carisma es mejor el mandatario que Maya según se analiza. No obstante, durante el proceso de campaña, el nuevo Alcalde mejoró de manera ostensible.

Un elemento que también le ayudó y de nuevo de la mano del mandatario pereirano fue la suspensión del cargo que la Procuraduría le impuso a Juan Pablo Gallo por participación en Política. Terminó Gallo como un mártir, como un perseguido político, despertó el fervor gallista y muchos pereiranos salieron a la calle a respaldarlo. Ese hecho a menos de una semana de las elecciones, benefició a Carlos Maya. Ante la suspensión “los del cambio” supieron reaccionar con habilidad y convirtieron en fortaleza un elemento que podría haber sido debilidad para Maya.

Se le reconoció a Maya que sí era el pura sangre gallista, que podría continuar con la senda del cambio que se le advierte al mandatario, según la percepción, a pesar de las denuncias en su contra por supuestos hechos de corrupción. 

Carlos Maya fue la columna vertebral en la administración de Juan Pablo Gallo en la parte financiera como Secretario de Hacienda desde donde se montó toda la estrategia de gobierno, con buenos resultados. Ese punto favoreció a Maya en las urnas.

La estructura política, era sin duda, la más poderosa. A su lado están la oficialidad del Partido Liberal en cabeza de César Gaviria Trujillo; el partido Conservador con los congresistas Merheg y Rivera; el partido político Mira, considerada una de las buenas conquistas; concejales del Partido de La U, y un sin número de listas al Concejo de varios partidos.

Además tenía a su haber el sector del gobernador Sigifredo Salazar, con su candidato Diego Naranjo a la cabeza haciendo fórmula, que aunque perdió, de cierta manera le ayudó.

No fue una campaña con dificultades económicas, por el contrario, siempre se le criticó por su opulencia a la hora de mostrar su imagen en piezas publicitarias en vallas, pendones y otros. La estrategia de imagen funcionó como un relojito, y supo esconder las debilidades del candidato en los debates cuando la embarró.

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