viernes, 11 de noviembre de 2016

DIMENSIONES

Columna de opinión
NO EXISTEN FÓRMULAS PARA ALCANZAR LA FELICIDAD HUMANA

Por: Uriel Escobar Barrios, M.D. *

En la columna anterior escribí sobre Carmen, la joven millennials quién formuló una pregunta clara y contundente. Es posible en la complejidad del mundo actual ser feliz?. Miles de textos se han escrito al respecto, muchos con respaldos de académicos reconocidos y hasta en el país la Dirección Nacional de Planeación hizo un estudio para medir el “nivel de felicidad de los colombianos”.


En la cultura occidental, signada por el afán consumista casi a diario circulan por las redes sociales, cuáles son los tips o las fórmulas que se deben aplicar para alcanzar ese estado de bienaventuranza. Sólo por colocar un ejemplo, en la Universidad de Harvard se dicta un curso de como aprender a ser felices y si usted desea hacerlo debe esperar por lo menos 2 años, porque 1.400 personas lo hacen semestralmente!.

El director de este programa de extensión, el psicólogo Tal Ben Shahar, considerado “el gurú de la felicidad”, resume en 13 sencillos pasos la fórmula para alcanzar el bienestar, los tres primeros son: Realiza actividad física, desayuna y se agradecido y siguen otros como, siempre saluda, usa zapatos cómodos. Usted cree amable lector que de esta manera se logra alcanzar?. Muchas personas si lo creen y de hecho nos envían con la mejor intención estos “sabios y liberadores consejos”.

Si desea hacer el curso, pues hágalo. Lo que si le garantizo es que esto no cambiará su vida. Y sabe porqué?.  Por algo muy sencillo y contundente: La felicidad no está en los zapatos o en la comida o en mostrar a cada momento una fingida cara de estar bien. Este es un estado del ser. Está dentro de ti.

Estamos condenados entonces los seres humanos a ser infelices?. No puede haber una solución positiva para Carmen?. Respuesta inmediata: Si podemos ser felices. Sin fórmulas, con una sola actitud y esta se resume en ser consciente de tu grandeza personal. El bienestar se encuentra en el interior. Vive de acuerdo a tus imperativos y no para complacer a los demás.

Recuerda el sabio consejo: “A nadie que no sean tus dos o tres seres queridos les importa tu existencia. Sólo a ti, es tu elección y responsabilidad”. Si no conoces tu propósito existencial, compra una manta, siéntate, cierra los ojos e indaga en tu mundo interior. Allí encontrarás las respuestas a todas las inquietudes. Este puede ser un proceso doloroso, pero, de una profunda riqueza. Allí está la felicidad. www.urielescobar.net. @urielbarrios16.

*Uriel Escobar Barrios, médico psiquiatra. (Esta columna de opinión es responsabilidad directa de su autor)

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