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| Foto: Gobernación de Risaralda |
Luego de dos años en pandemia y de no poder realizar ceremonias masivas, el Hospital Universitario San Jorge de Pereira a cargo de la gerente María Elena Ruiz Guarín y con el acompañamiento de la Primera Dama de Risaralda, Nathalia Sierra Ramírez, realizó la graduación de 51 bebés menores de dos años del programa Madre Canguro, quienes cumplieron satisfactoriamente su recuperación.
Jhon Byron Martínez Ríos, médico pediatra, coordinador del programa, destacó que se graduaron los pequeños más valientes que por diferentes razones nacieron antes de la semana 37 de gestación, con un peso de menos de 2.500 gramos y que por sus condiciones de salud, tuvieron que luchar para sobrevivir, “y estamos celebrando esta fiesta porque han logrado su desarrollo, han ganado peso y tienen las habilidades que los hacen merecedores de su grado”.
Destacó que la situación es muy crítica para muchos recién nacidos, muchos nacen con 450 gramos de peso, enfermedades pulmonares y una vez aquí hacemos un trabajo interdisciplinario y lo recuperamos, “Cada niño es un espectáculo, es una promesa de vida, es un reto, porque los prematuros tienen un alto riesgo de morir en los primeros seis meses de vida y aquí la importancia es el seguimiento permanente que les damos”, dijo el pediatra.
Por su parte, Sierra Ramírez indicó que “Madre Canguro representa vida, oportunidades, es decirles a los niños de Risaralda que tienen derecho a la vida, a la salud. Estamos orgullosos de los profesionales del San Jorge quienes hacen posible que los niños desde el momento de su nacimiento cuando tienen tantos problemas de salud, sigan luchando por su vida”.
El Método Madre Canguro se constituye en un aporte de la medicina colombiana a la medicina universal, el cual consiste en un contacto piel a piel prolongado y continuo entre la madre o un substituto y el bebé prematuro o de bajo peso, con lactancia materna exclusiva preferiblemente.
Por este programa pasaron las 27 niñas y 25 niños que se graduaron este 2022 y que ahora recuperados son la alegría de sus familias.
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