Sabemos de dónde saldrá la plata

Juan Pablo Gallo ante el Senado

Claus Adara – Desde el Caribe

Una mirada compasiva y una mueca burlona fue lo que recibió el neófito senador Juan Pablo Gallo, oriundo de Pereira, del ministro José Antonio Ocampo, cuando con un discurso discordante el político lo inquirió sobre de dónde iba a salir la plata para financiar las propuestas del presidente Petro.

Aunque la respuesta es obvia: de la Reforma Tributaria, Gallo quería aparecer como un sabelotodo en economía, frente a uno de los más reconocidos economistas del mundo. Muy seguramente el senador Gallo no sabe que ese señor de pelo blanco que estaba sentado a su izquierda, fue el secretario general adjunto de Naciones Unidas para temas económicos y que los más respetados economistas del mundo destacan sus méritos.

Para la gente de allá de Pereira y Risaralda debe ser muy penoso, queridos lectores de El Blog del Ministro, que el congresista Gallo haga esas salidas en falso y se convierta en el centro de una comidilla burlesca sobre sus apreciaciones.

Me decía “Guineo” Vélez, tan cercano a las familias “de bien” de la “querendona” Pereira, que esa intervención dejó muy mal parada la inteligencia política de una ciudad que tuvo a César Gaviria Trujillo, como Ministro de Hacienda antes de ser Presidente de la República.

“Claus, no se compadece que Gallo haga quedar mal a Pereira, donde nació Jorge Mario Eatsman, que era arrogante, pero muy inteligente”, me dice “guineíto”, como llamamos a este pereirano refugiado en el calor de la capital del caribe.

Y en su retahíla cuenta que Pereira tiene políticos muy importantes como uno que fue senador de apellido Ángel, el exministro Rodrigo Rivera “una lumbrera desde que estaba chiquito”, Fabio Villegas que fue presidente de Avianca, otro Villegas que fue presidente de la Andi y ministro de Defensa, y así como estos, otros muchos que han tenido influencia en la política nacional… se me olvidaba a Iván Marulanda, un portento de congresista y el “pipe” Córdoba, un aventajado.

El senador Gallo debe tener en cuenta que con esas apariciones públicas y esas ganas de figurar en las redes sociales, se puede convertir en un político respetado y acatado, o terminar siendo una especie de “manguito” o de “Moreno de Caro”. El tema es que va por este último camino, pero puede corregir su andar.

Para finalizar, la plata para los proyectos anunciados por Petro, querido senador Gallo, saldrá de los impuestos que paguemos los colombianos, del mayor recaudo de la nueva reforma tributaria y de una priorización en el gasto. Para contestar esto, no necesité ser un economista como Ocampo, sólo leer algunos periódicos especializados. Una recomendación, no lea Semana, porque termina diciendo tonterías.

Nota: Esta columna de opinión es responsabilidad directa de su autor